¿Sabías que el aire y los alimentos tratados son una gran fuente de toxinas para tu cuerpo? Seguro que no siempre consumes alimentos 100% naturales. Los alimentos tratados y la contaminación en el aire hacen necesaria la limpieza tanto externa como interna de nuestro cuerpo. Pero, ¿cuáles son las razones por las que desintoxicar el organismo es necesario?

¿Por qué debes desintoxicar tu organismo?

El hígado es el órgano más importante para desintoxicar el cuerpo. Tiene la función de filtrar todo lo que el cuerpo ingiere para absorber la energía, recoger los nutrientes y eliminar todo lo que no necesita.

Seguro que alguna vez has experimentado la sensación de pesadez o de tener el estómago lleno de gases y molestias. Se trata de una de las causas por las que el organismo necesita un buen depurado.

Te explicamos algunas señales que emite el cuerpo cuando detecta un exceso de toxinas:

Síntomas internos: hígado, estómago e intestino

  1. Sentir fatiga: cuando el hígado se sobrecarga de toxinas, la energía disminuye y puedes sentir cansancio o dolores de cabeza agudos.
  2. Tener problemas de digestión: puede que sientas pesadez, exceso de gases o molestias en la zona intestinal. Puede que sientas náuseas y/o diarrea constante cuando ingieres grasas.
  3. Sufrir estreñimiento: cuando no vas al baño de forma regular y notas que te cuesta evacuar, algo no va bien en tu intestino. Además, puede que notes mal aliento y tengas una capa blanca o amarilla en la lengua.
  4. Experimentar cambios de humor: puede que tu estado de ánimo varíe cuando el hígado se sobrecarga de toxinas.

Síntomas externos: piel

La piel cumple una función muy importante en la detección de problemas de salud. Los cambios en la piel se deben a multitud de estados por los que puedes pasar, tanto físicos como mentales. En este caso, puedes observar tu piel para saber si todo va bien en tu interior.

Si sientes fatiga puede que tu piel pueda volverse de un tono grisáceo, si te deshidratas seguramente tendrás la piel más seca y/o si abusas de azúcar acumularás muchas toxinas y notarás la piel más flácida. También el exceso de grasa en la zona de la cara, provocado por una mala alimentación, puede suponerte un problema de acné