El orzuelo se define como la aparición de un bultito en la zona del párpado que normalmente se debe a la infección de una glándula sebácea. Puede ser externo o interno, dependiendo de la cara del párpado en la que aparece. No obstante, el tratamiento es el mismo.

A veces el orzuelo se puede confundir con un granito de pus, pero es muy importante no tocarlo y tampoco intentar reventarlo. Esto podría agravar la infección y tener que recurrir a tratamientos más fuertes e incluso, en última instancia, a la intervención quirúrgica.

Síntomas de un orzuelo

Para distinguir la aparición de un orzuelo de un granito de pus puedes tener en cuenta:

  • Aparición de un bultito doloroso en la zona del párpado
  • Enrojecimiento
  • Hinchazón en el párpado
  • Irradiación de calor
  • Mayor sensibilidad a la luz solar
  • Picazón y lagrimeo en el ojo

Si distingues estos síntomas significa que lo que te ha aparecido en el ojo es un orzuelo.

Tratamiento de un orzuelo en casa

Tras la aparición de un orzuelo en el párpado es importante dejar que drene solo, manteniendo una buena higiene de la zona. Te recomendamos limpiar la zona con toallitas oftalmológicas de un solo uso.

Además, también puedes ayudarle a drenar con compresas estériles empapadas con agua caliente para favorecer el drenaje. Y si el médico lo considera, se recetará una pomada con antibióticos y antinflamatorios. Es muy extraño, aunque no imposible, que el tratamiento termine en el quirófano.

Consejos para acompañar el tratamiento

Algunos consejos que nos gustaría compartir contigo durante el tratamiento son:

  • No compartas toallas, almohadas o maquillaje con otras personas. El orzuelo es una infección que se puede propagar fácilmente.
  • Deja de maquillarte y usar lentes de contacto mientras dure la infección. De este modo, evitarás propagar la infección a otras zonas del ojo sanas.
  • No hagas caso de remedios antiguos como aplicar el calor de un anillo de oro o plata. Lo que realmente hace efecto en el orzuelo es el calor que propaga dicho elemento y, por lo tanto, será mucho más higiénico y seguro hacerlo con una compresa caliente estéril.
  • Si con estos remedios el orzuelo no mejora, acude a un oftalmólogo para que te recete un tratamiento farmacológico.